Previo a
que Vélez Sarsfield fuera eliminado de la Copa Sudamericana , a manos de
la poderosa Liga deportiva Universitaria de Quito, Guarismos pudo hablar con el
entrenador del equipo, Ricardo Gareca. Si bien el golpe de quedar marginado de
la única competición en la que tenía chances fue duro para los de Liniers, el
técnico es una excepción en un fútbol devorador de colegas suyos.
A finales
de 2010 estuvo en duda la continuidad del “Tigre” al frente de la “V azulada”,
pero el convencimiento de la dirigencia fue vital para mantenerlo en el club.
Ya pasaron tres años desde que dirige la batuta del “Fortín” y es un buen
momento para hacer un balance. Esa es la idea de Guarismos, repasar la gestión
y algunos números de la campaña de Gareca.
- ¿Qué cambiaste en la modalidad de trabajo
para pasar de aquel equipo utilitario de 2009 a ser uno de los que mejor juega de la
actualidad?
- Hemos tratado de ir afianzando cada vez más
los conceptos. Creo que no hay tanta diferencia respecto de 2009; pero creo que
el equipo ha mantenido la mentalidad y ha sostenido un rendimiento y una idea
de juego a lo largo de todo este período. Ha tenido mejores producciones que
otras; pero, por ejemplo, en su táctica no ha cambiado y tampoco en la
característica de sus jugadores. Ha mantenido una idea de juego. La sostuvo.
- ¿Qué Vélez te gusta más, el de 2009 o el de
2011?
- Estoy agradecido a los muchachos por cada
una de las etapas. No podría comparar porque todos los planteles que tuve me
dieron satisfacciones diferentes. Prefiero acordarme que Vélez mantuvo la idea
futbolística. Ahora quedará en los periodistas y en el hincha analizar qué
equipo les gustó más.
- El equipo también fue reconocido a nivel
internacional…
- Este año llegamos mucho más lejos a nivel
internacional. En 2009 llegamos a cuartos de final en la Copa Sudamericana , pero como
jugamos en las copas de este año no posicionó de otra manera.
- Vos llevas casi tres años como DT de un
mismo club. ¿Influye la falta de un proyecto en un fútbol en el que sos una
excepción?
- Sin un proyecto no se puede lograr cosas
importantes. El entrenador necesita un ambiente de tranquilidad, un ambiente en
el que sienta respaldo para hacer un buen trabajo. Por eso es necesario un
proyecto: si vos vas a un lugar donde hay problemas permanentemente, eso atenta
contra el rendimiento del equipo y la elaboración de los proyectos.
- ¿De qué manera te apoya a vos la dirigencia
de Veléz?
- En no desarmarme el equipo y planear un
futuro basado en proyectos de chicos que salgan de las divisiones inferiores.
Quizá no sean muchos los jugadores juveniles, pero el balance con los muchachos
de experiencia es fundamental.
- ¿Cómo es la negociación con los dirigentes
para que venda lo que necesita y, al mismo tiempo, se mantenga el plantel?
- Con Basedas, nuestro manager, compartimos el
proyecto y sabemos que las dos cosas son importantes. Tanto la economía como
los triunfos deportivos se mantienen el uno al otro.
- ¿Es así en todos los clubes?
- No; de hecho en casi ninguno. Aunque de
otros prefiero no hablar, no los conozco desde adentro. Pero en el fútbol
argentino falta planificación.
- Y, más allá del plantel, a Vélez se lo toma
como uno de esas instituciones modelo. ¿Qué otras garantías te da la
dirigencia?